La soledad: esa buena y mala compañia

Cuando el facebook es nuestro mejor amigo
Cuando miramos 20 veces la bandeja de entrada de los mails a ver si hay alguien interesante que desee comunicarse.
Cuando chequeamos el movi, para ver si esta prendido o el señor Movistar solamente quiere decirnos que ofertas existen hoy.
Cuando esperamos un llamado de línea.
Cuando salimos a la calle esperando una mirada, una respuesta, una acción
Cuando los silencios se hacen largos, y los encuentro son pocos
Cuando estando con alguien igual nos sentimos Nadie
Cuando tenemos cosas que contar, pero no sabemos aún a quien decírselas para que nos escuche
Cuando la cama se hace fría, y necesitamos mas de mil almohadas
Cuando los libros lo inundan todo
Cuando la música es una compañía amigable
Cuando el gris del día se convierte en lo oscuro, en lo negro, en lo sin salida
Es ahí, cuando nos damos cuenta que aún no estamos acostumbradas a la Soledad
Es ahí, donde nos sacamos el maquillaje, las vestiduras, el ornamento y nos encontramos en la incomodidad, del silencio, de la quietud, de los blancos, del vacío.
Es ahí, donde entendemos que aún no entendemos a la soledad como productiva
Es donde , tal vez, esos otros que elijimos para compartir nuestras horas, solo llenan unos pocos agujeritos –
Para combatirla, a ella, a la nombrable e innombrable: SOLEDAD
Me invento un mundo
Me invento mi mundo
Me trepo a la creatividad, a la aventura, a mil colores, a mil escritos
Me subo a la magia de la imaginación y pinto a mi gusto esta Soledad no esperada, no soñada, no querida.
Tomo paginas en blanco del Word y las lleno de palabras
Así soy, habladora, escritora, pintora, imaginadora….
Así soy, una mujer inquieta en la quietud de un domingo gris.