Sabor a mi

Realidad? Fantasìa? Disfrutalo

Que locura era esta, estar servida para vos…como un banquete
Carne, piel, respiración, cabellos, fragancia.
Todo eso a tu antojo, para empacharte.
Te invite a degustar y habías accedido.
Primer plato, plato principal y postre
Sobre la mesa Yo
Sin cubiertos, sin manteles, sin plato.
Exhibida, exuberante, entregada.
Hoy ibas a deleitarte con todos los sentidos: Vista, olfato, tacto, gusto y oído
La mesa era de roble, rustica, antigua.
Un rayo de sol se colaba por la ventana y me iluminaba parcialmente.
Te inclinaste para besarme o para comerme¿ no lo se? A eso no se lo podía llamar beso.
Mordiste dulcemente mis labios, bajaste por cuello haciendo que tu lengua ágil y decidida degustara cada centímetro de piel. Succionaste cada pliegue, cada imperfección lascivamente.
Te alejaste y fuiste a mis pies, yo me sentía contemplada, dispuesta a ser deglutida por vos. Comenzaste a lamer uno por uno mis dedos, los metías en tu boca, jugabas con ellos, los succionabas y volvías a recorrerlos. Pude oler el placer que sentías, no necesitaba mirarte, no necesitaba sentir tu piel, conocía tu aroma salvaje.
Vos saboreabas, degustaba, ingerías. Subiste por la pantorrilla entre lamidas y mordiscos…te detuviste..Allí en mi intimidad mas profunda, en mi centro sublime de placer.
Lamiste, jugaste, me penetraste, te sumergiste.
Yo me movía zizageante, desbordada, entre jadeos, gritos y gemidos..No se cuanto duro, 1 minuto, 10, media hora…
Por fin, te di el licor de mi esencia, ese tan especial que a un cualquiera no le doy.
Te lo entregue a vos..
Vos lo merecías..vos merecías conocer el sabor supremo de mi ser
Quede relajada, suspirando, luego de esa pequeña muerte que uno siente cuando tiene un orgasmo.
Apoyaste tu cabeza en mi vientre y me miraste satisfecho, como cuando uno disfruta de un menú suculento.
Te mire y en un susurro dije
“Hoy..conociste mi sabor, ahora te va a ser difícil olvidarlo”